El valor de las exportaciones italianas de Bello e Ben Fatto (Bello y Bien Hecho) asciende a 135.000 millones de euros, con un potencial de crecimiento de 82.000 millones: esto es lo que se desprende del Informe “Exportar la Dolce Vita“ que el Centro de Estudios de Confindustria ha vuelto a elaborar este año, en colaboración con Unicredit y con la contribución de SACE, Netcomm y la Fondazione Manlio Masi - Observatorio Nacional de Asuntos Internacionales y Comercio. El Informe, que se presentó el 20 de julio en la sede de Confindustria en Roma, se centra en el macrosector de “Bello e Ben Fatto“ (Bello y Bien Hecho), que engloba todos aquellos bienes que representan la excelencia italiana en términos de diseño, cuidado, calidad de los materiales y mano de obra, cuyos pilares principales son las “3F“ (Moda, Alimentación, Mobiliario), además de los relativos a la Cerámica, la Cosmética, la Náutica y la Industria del Automóvil.
La mayor parte de las excelencias italianas se dirigen a los mercados avanzados, que absorben unos 114.000 millones de euros, mientras que el importe de las excelencias exportadas a los países emergentes asciende a más de 20.000 millones de euros, que por un lado ofrecen mayores márgenes de crecimiento, pero por otro, mayores riesgos.
Margen potencial para aumentar las exportaciones
El informe “Exportar la Dolce Vita“, cuyo subtítulo es “El potencial del Made in Italy en el cambiante panorama internacional“, indica que existe un margen potencial de aumento de las exportaciones dentro del BBF de 82.000 millones de euros. Más de tres cuartas partes de este potencial se encuentran en los países avanzados (62.000 millones de euros) y el resto en los países emergentes (20.000 millones de euros).
Estados Unidos es el mercado con mayor potencial en términos absolutos, con 15.500 millones de euros de posibles exportaciones adicionales. Un alto potencial también para Francia, Alemania y el Reino Unido, que en conjunto tienen un potencial de 13.700 millones de euros. De los países emergentes, China es el que ofrece un mayor margen de mejora a medio-largo plazo, con 3.900 millones de euros de posibles exportaciones adicionales, lo que confirma su posición como país emergente con gran potencial exportador, pero también como su principal competidor.
Las perspectivas de crecimiento de Asia mejoran gracias al RCEP
Una fuerte señal a favor del libre comercio es la reciente creación de la Asociación Económica Integral Regional (RCEP), el mayor acuerdo de libre comercio que comprende los diez países del grupo ASEAN más Australia, China, Corea del Sur, Japón y Nueva Zelanda. El Acuerdo, que entrará en vigor una vez ratificado por al menos seis países de la ASEAN y tres de fuera de ella, contribuirá a reforzar los lazos comerciales entre las economías que se han adherido a él, aumentando su capacidad de consumo. Las exportaciones “Made in Italy“ se beneficiarán así de un mercado más rico.
La pandemia ha acelerado los cambios en curso
Los efectos de la pandemia del Covid-19 no perdonaron ni siquiera al BBF, que sufrió fuertes repercusiones, especialmente en los sectores relacionados con la moda, aunque algunas excelencias del Made in Italy siguieron creciendo en 2020, mostrándose especialmente resistentes.
“La crisis de Covid-19 ha tenido un efecto propulsor de las tendencias en curso, provocando un salto de velocidad en las transformaciones sociales y, como consecuencia, en la economía. Sobre todo, un mayor impulso a la digitalización. - comenta Barbara Beltrame Giacomello, Vicepresidenta de Internacionalización de Confindustria. “El reto -concluyó- es ahora entender cómo transformar nuestras empresas: reforzar los canales de venta digitales, estabilizar las relaciones internacionales y preservar y aumentar la reconocibilidad del Made in Italy“.