La situación de crisis a la que tuvimos que enfrentarnos nos llevó a reflexionar sobre muchas “certezas“ que creíamos inmutables, incluyendo la forma en que trabajamos y hacemos negocios. La emergencia de Covid-19 nos obligó a cambiar y a tener una visión general más abierta, a centrarnos en la digitalización y en los nuevos métodos de comunicación, a invertir en formas alternativas de negocio: esto es lo que se desprende de las interesantes consideraciones de Luca Eustacchioni, director general de Omge, empresa líder en el mercado de la producción de guías de cajones y sistemas de deslizamiento para puertas y muebles.
En una situación de crisis pueden surgir nuevas oportunidades. ¿Habrá cambios en su realidad empresarial y si es así, cuáles?
“El hecho de que la causa sea de naturaleza sanitaria ha hecho que esta crisis se manifieste de manera totalmente impredecible, atrapando a casi todos los empresarios, medianos, pequeños o grandes, absolutamente desprevenidos. Pensar que muchos directores generales han podido incluir en el pasado este tipo de riesgo en el análisis de la gestión de riesgos es, de hecho, bastante difícil. Como todos los períodos de crisis profunda, esto llevará al final de las lecciones que cada CEO podrá tener en cuenta. Más allá de los aspectos relacionados con el control del flujo de caja, las cuentas por cobrar, las formas de pago y una mejor distribución de los costos que la crisis evidentemente enseñará a fortalecer, piense por ejemplo en la importancia que podría tener en el futuro el concepto de “trabajo inteligente“, tan alejado de la mentalidad más bien tradicionalista del empresariado italiano. La racionalización de las estructuras, una mejor gestión de los apoderados, tanto en la fase de concesión como en la de recepción, una mayor responsabilidad de los intérpretes son sólo algunos de los aspectos ventajosos que podrían derivarse de esta situación. Obviamente en la actividad de fabricación el concepto no es muy aplicable salvo para las tareas comerciales-administrativas, pero la visión general más abierta que la situación actual obliga a asumir a las empresas italianas será una ventaja para el futuro.
En nuestro caso concreto, esto irá acompañado de la adquisición de mayores conocimientos en el mundo digital que permitirán a los operadores superar la falta de contacto físico entre empresa y cliente que las medidas sanitarias les impiden tener. Por lo tanto, los grandes cambios que trataremos de hacer a nuestra realidad irán en esta dirección, la digitalización y los nuevos métodos de comunicación. Creo que un retorno completo a “como era antes“ nunca ocurrirá excepto en un tiempo muy largo y en formas que no serán las mismas de todos modos; también creo que el mundo de los negocios será capaz de adaptarse. El ejemplo más clásico es el de la enseñanza escolar, que ha sido capaz de transformar las aulas en conferencias telefónicas en poco tiempo. Si esta situación se prolonga en el tiempo, también se cuestionará la validez de las ferias comerciales del sector, por lo que es importante invertir en formas alternativas de negocio y comunicación“.
En este período la importancia de la red ha surgido con mayor fuerza. ¿Está pensando en usar estos medios más aún después de la emergencia?
“Diría que ya he respondido implícitamente a esta segunda pregunta en la respuesta anterior. Desde hace algún tiempo ya habíamos iniciado un proceso de actualización de las herramientas de la web en previsión de la absoluta necesidad de desarrollar su uso. Estamos reestructurando nuestro sitio web para poder prever en un primer momento la posibilidad de hacer negocios B2B y luego, en una etapa posterior, evaluar también la entrada en los negocios B2C, lo que obviamente tendrá que implicar una reestructuración interna para permitir su aplicación. Cualquier herramienta de marketing digital tendrá que ser una alternativa a la eficacia decreciente de las herramientas tradicionales y a la imposibilidad, al menos por el momento, de tener una presencia directa en los mercados. Así que para responder a su pregunta diría que más que pensar o no en utilizar más los medios digitales nos veremos obligados a hacerlo para no perder visibilidad“.
Además de la calidad de los productos y la innovación tecnológica, ¿en qué otros elementos piensa centrarse para reforzar su imagen en los mercados nacionales y extranjeros (calidad del trabajo, sostenibilidad, medio ambiente, solidaridad...)?
“Yo diría que la palabra 'sostenibilidad' engloba todo lo que contribuye a mantener esta característica en los procesos empresariales, empezando por la sostenibilidad financiera, que es lo más importante para las empresas, y terminando con la sostenibilidad en términos de calidad de trabajo, medio ambiente, etc.“. Más allá de los dos meses en los que hemos podido trabajar muy poco, lo que más me preocupa es la reducción de la demanda en los mercados que caracterizará a los próximos meses y, por lo tanto, la sostenibilidad financiera es lo primero a lo que hay que prestar atención para evitar que los problemas graves puedan llegar a ser irremediables. La calidad del trabajo, el medio ambiente, la atención a los empleados y a la fuerza de trabajo son todos aspectos éticos que contribuyen a la sostenibilidad de la empresa. Aparte de los productos, la calidad y la tecnología que obviamente son la base, creo que la mejor imagen que una empresa puede dar es la de ser sólida y presente. Lo que tenemos que hacer es mantener esta convicción viva en nuestros clientes y tenemos que hacerlo a través de la comunicación moderna, integrando los aspectos de producto e innovación con otros aspectos más relacionados con la vida de la empresa.